Romana

El sábado 26 de octubre, tres mil personas se han reunido en el Gran Teatro de Roma, en la periferia norte de la ciudad, para participar en un encuentro de las familias romanas con el prelado del Opus Dei.

Mons. Echevarría habló acerca del Papa Francisco ya desde el comienzo, en su alocución introductoria, y también después, respondiendo a una pregunta de un estudiante universitario. “El Papa, que no quiere nada para sí mismo”, ha dicho, “quiere vuestra caridad, vuestra ayuda, vuestro afecto, que tiene que traducirse en vuestra oración diaria por su persona”.

Otras preguntas han tocado los temas de la educación, de la transmisión de la fe y de la vida cristiana en familia. A un matrimonio, por ejemplo, el prelado les ha animado a edificar la vida diaria, con sus propios hijos y con otras familias, sobre la base de su propia experiencia de amor recíproco y de felicidad.

A una joven estudiante, que le ha preguntado por don Álvaro del Portillo, Mons. Echevarría le ha recordado la generosidad y la valentía que demostró su predecesor al frente del Opus Dei. En concreto se refirió a un episodio de la juventud de don Álvaro, cuando, en un barrio del extrarradio madrileño al que iba para atender las carencias de la población, fue acosado por un grupo de exaltados y golpeado en la cabeza con una llave inglesa.

Al término de la tertulia, muchas de las familias se han organizado para tener un picnic en un parque y trasladarse luego, a primera hora de la tarde, al Vaticano, con el objeto de participar en el encuentro de las familias con el Papa en el Año de la Fe.