Romana

El 5 de febrero se cumplieron 75 años del inicio de la labor apostólica del Opus Dei en Portugal. Ese mismo día, la Región de Portugal comenzó un año de acción de gracias. Las circunstancias causadas por la pandemia condicionaron los planes de las celebraciones de este evento.

Monseñor José Rafael Espírito Santo, vicario del Opus Dei en Portugal, recitó el Rosario en la Basílica de Nuestra Señora de Fátima, como señal de agradecimiento. Millares de personas pudieron unirse a través de la radio y la televisión. Se rezó por el Papa Francisco, las necesidades de la Iglesia universal y local, las víctimas de la pandemia, el personal sanitario y quienes colaboran con los afectados por COVID-19. Entre las intenciones estuvieron los miembros de la Prelatura, sus amigos y los cooperadores, a muchos de los cuales les hubiera gustado estar allí presentes, pero, por razones de salud pública, no fue posible. Para la contemplación de los misterios se leyó Santo Rosario, un libro de san Josemaría.

En la misma Basílica, el vicario tuvo la oportunidad de rezar junto a la tumba de Sor Lucia, agradeciendo su intervención en la llegada del Opus Dei a Portugal. Mons. José Rafael Espírito Santo se acercó también a la Capelinha de las Apariciones y encendió tres cirios en honor a la Virgen. Una familia dejó 75 rosas a los pies de Nuestra Señora de Fátima.Otro modo de resaltar este aniversario fue la realización de una exposición itinerante con el objetivo de dar a conocer la historia del Opus Dei en Portugal. Se instaló en el Oratorio de San Josemaría en Lisboa, en el mes de abril, y el 8 de mayo se trasladó a Cascais. Posteriormente la muestra se podrá visitar en las distintas ciudades de la geografía portuguesa.